Si su monitor de repente muestra más amarillo de lo habitual en la pantalla, no debería sorprenderse. No está viendo cosas: un tinte amarillo es un problema común relacionado con la pantalla del ordenador. A veces, el principal culpable es un cambio en la configuración del software, pero hay ocasiones en que es una señal de un error de hardware.
Antes de llamar a los expertos, es posible que desee tratar de resolver el problema usted mismo. La mayoría de las veces, puede arreglar la pantalla con bastante facilidad. En este artículo, analizaremos las causas comunes de la aparición del tinte amarillo en su monitor y explicaremos cómo restaurar el color de su monitor a la normalidad.
Cambiar el perfil de color en Configuración del sistema
Un perfil de color es un conjunto de datos que indica al sistema cómo deben verse los colores en la pantalla. A veces los colores pueden parecer descoloridos, mientras que otras veces un color específico puede dominar la pantalla.
Por lo general, Windows 10 muestra bien los colores, pero algunas modificaciones en el sistema pueden hacer que cambie el perfil de color. Para verificar si esto está causando el tinte amarillo y cambiarlo, debe hacer lo siguiente:
- Haz clic en el icono del menú Inicio en la parte inferior izquierda de la pantalla.
- Empieza a escribir «Panel de control» en la fresa de búsqueda hasta que aparezca el icono.
- Abra el Panel de Control.
- Seleccione el menú «Gestión de color».
- En la sección’ Dispositivo’, elija el monitor de color amarillo en el menú (debe seleccionarse de forma predeterminada).
- Marca la opción ‘Usar mi configuración para este dispositivo’.
- Haz clic en el botón’ Añadir…’.
- Seleccione el Perfil de Modelo de Dispositivo Virtual sRGB.’
- Haz clic en «Aceptar».’
- En la sección «Perfiles asociados a este dispositivo», selecciona el perfil que has añadido.
- haga Clic en » Establecer como Perfil Predeterminado.’
Cuando cambie el perfil de color a este, el tinte amarillo debería desaparecer. Si permanece, pruebe algunos de los otros métodos.
Desactivar el modo nocturno
Otra razón común para un tinte amarillo en el monitor es la luz nocturna. Cuando habilita este modo, apagará la luz azul brillante de la pantalla y mostrará solo colores cálidos para proteger sus ojos.
Es posible que haya activado accidentalmente la luz nocturna o que la configuración esté haciendo que se active en un momento determinado. Afortunadamente, es fácil lidiar con este problema. Todo lo que tienes que hacer es lo siguiente:
- Abre el menú Inicio.
- Seleccione el icono de Configuración (engranaje).
- Elige el menú «Sistema». Debería aparecer una nueva ventana.
- Seleccione la pestaña «Mostrar» en el lado izquierdo.
- Apague el interruptor de la luz nocturna.
Alternativamente, puede presionar la tecla Win + A para abrir un menú de acceso rápido en la parte inferior derecha de la pantalla y ver si la opción ‘Luz nocturna’ está habilitada.
En la configuración de pantalla, puede seleccionar la opción «Configuración de luz nocturna» para ajustar la calidez de los colores y/o elegir cuándo o si la función debe activarse.
Actualizar controladores de video
Los controladores de video deben actualizarse automáticamente, pero a veces pueden omitir una actualización o experimentar un error durante la instalación. En estas situaciones, es posible que note que algunos aspectos de la pantalla de video no funcionan como deberían, incluido el color del monitor.
Para actualizar los controladores de vídeo manualmente, esto es lo que necesita:
- Haga clic con el botón derecho en el menú Inicio.
- Seleccione el Administrador de dispositivos.’
- haga Clic en la flecha junto a «adaptadores de Pantalla» para expandirla.
- Haz clic con el botón derecho en el nombre de tu tarjeta de vídeo.
- Seleccione » Actualizar controlador.’
- Haga clic en «Buscar automáticamente software de controlador actualizado».’
- Si hay nuevas versiones del controlador, el sistema las encontrará y actualizará su tarjeta de video.
Después de esto, es posible que deba reiniciar su computadora. Una vez que hagas esto, ya no debería haber un tinte amarillo.
Compruebe si hay problemas de hardware
Si tiene un PC con un monitor y una tarjeta de vídeo separados, puede intentar solucionar manualmente los problemas de hardware. Esto es lo que puedes hacer:
- Compruebe en el interior de la carcasa del PC si la tarjeta de vídeo se encuentra correctamente en su toma de corriente. Algunas computadoras tienen una tarjeta de video directamente en la placa base, pero la mayoría tienen una toma de tarjeta de video separada. Si la tarjeta de vídeo no está completamente conectada al zócalo, puede causar algunos problemas de vídeo.
- Vea si los cables están conectados a su monitor y al puerto de su computadora. Además, inspeccione si hay algún daño en el cable. Incluso una pequeña ruptura del cable puede afectar a la transferencia de señales electrónicas entre el ordenador y el monitor, afectando así a la pantalla.
- Su monitor probablemente viene con un manual, por lo que debe comprobarlo. La mayoría de los monitores también se pueden usar como televisores. Por lo general, tienen algunos ajustes por su cuenta que pueden controlar el color y la visualización en la pantalla. Su monitor podría tener botones que controlan el tinte, el contraste, el brillo, etc. para que pueda personalizarlos según sus preferencias.
- Algunos monitores antiguos pueden magnetizarse, lo que puede provocar cambios en la pantalla y los colores. La mayoría de estos monitores tienen un botón ‘Degauss’ que debería eliminar cualquier campo magnético, así que comprueba si el tuyo lo tiene. Si no, puede arrastrar un botón magnético muy pequeño sobre su monitor y ver si el color vuelve a la normalidad.
Quítese las gafas de color amarillo
Como puede ver, hay muchos problemas relacionados con el software y el hardware que pueden provocar la aparición de tinte amarillo en su monitor. Afortunadamente, la mayoría de las veces el problema no es serio y no hay nada de qué preocuparse.
Sin embargo, si ha probado todo y no nota ningún cambio, lo mejor sería llevar su computadora o monitor al servicio de reparación. Los expertos pueden diagnosticar el problema y encontrar una solución en cuestión de minutos.